La columna cervical y la cabeza están en intima relación, pero esto no es lo mas importante; la médula espinal es la prolongación del cerebro y atraviesa la columna vertebral liberando a lo largo de su recorrido las raíces nerviosas que van y vienen hacia y desde todo el cuerpo. Ya sea por una hernia de disco, artrosis, rectificación cervical o simplemente estrés vamos a sufrir trastornos en el funcionamiento de nuestro cuerpo provocando no solo dolor sino también mucha angustia.

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Dependiendo de la estructura que se encuentre afectada pueden verse afectadas los sistemas nerviosos que nos pueden dar síntomas irradiados hacia los hombros, brazos y cabeza. Pero también puede provocar una alteración de la circulación de sangre hacia el cerebro generando mareos, trastornos de la vista y la memoria. Por todo esto es imprescindible obtener un diagnóstico preciso para proyectar un tratamiento exitoso.